¿Qué fotografiar cuando empiezas en la fotografía?

1. Lee, mira, investiga

Para saber en qué te metes nada mejor que mirar muchas fotografías, leer sobre ellas, inspirarte con ellas. No hace falta que te compres infinidad de libros, que vaya si son caros además, sino que con el uso de las redes como Flickr, por ejemplo, puedes encontrar grandes imágenes. Basta con poner en el buscador palabras claves que te interesen, como paisajes, retrato, gatos, niños, bodas, lo que gustes y saltarán a la vista miles de ejemplos. Además pinchando en el tipo de cámara con la que la han sacado te aparecerán todos los datos EXIF, es decir aquellos datos que te apuntan la exposición, apertura y otros datos útiles sobre cómo fueron tomadas. Y si alguna capta realmente tu atención por el tipo de iluminación o composición, pues ¡arriésgate! y a ver qué tal te sale a ti.

2. Experimenta

Si aun estás en la etapa de no querer salir a la calle, pues tienes mucho para hacer en casa. Arma tu propia caja de luz con poquísimo dinero y un par de objetos de uso cotidiano como jarras, relojes, estatuillas, etc y practica el arte del bodegón, o naturaleza muerta. Con esto aprenderás también sobre iluminación y cómo afecta al modelo. Si te atreves a más, intenta con tutoriales en youtube, como por ejemplo fotografiar gotas de aceite de cocina, verás las imágenes increíbles que puedes lograr.

3. Macros

Realmente no hace falta tener un objetivo macro para esto cuando recién comienzas. La mayoría de las últimas cámaras, sobre todo las SRL, tienen una función específica para al menos sacar muy buenas fotos de objetos pequeños. ¿Quién no tiene una planta o flor en casa?, pues puedes comenzar a experimentar también con este tipo de fotografía.

4. Ritmo y Texturas

Fíjate qué maravilla cómo unas simples setas pueden lucir. Jugar con el ritmo, es decir con la repetición de líneas y formas, es estupendo para comenzar. No necesitas grandes modelos y ahora que comenzó el Otoño, o Primavera según dónde te encuentres, es ideal buscar formas o líneas continuas que puedan hacer una gran imagen. Lo mismo si te decides por la textura, un tronco viejo, una pared de ladrillos, un reboque desgastado. Que no te de miedo jugar con aperturas y velocidades para experimentar con la luz. Incluso aquí también puedes usar la caja de luz, o lightbox, que nombrábamos más arriba y algunas frutas o verduras.

5. Retratos

Todos tenemos alguna amistad, novia o novio, dispuestos a ayudarnos como modelos. Recuerda que, no importa lo que digan, el retrato no siempre debería relacionarse con el rostro; manos, pies, posturas en que el rostro aparece cubierto también pueden decir mucho de una persona. Combina, ahora que lo digital lo hace más fácil, tomas en color y en blanco y negro y sácate de la cabeza que para esto necesitas un estudio profesional montado. Puedes hacer tu propio estudio, en la web hay incontable cantidad de tutoriales al respecto. Y si no encuentras algún buen samaritano que te eche una mano como modelo, siempre puedes recurrir a las mascotas. Esto último incluso es todo un desafío ya que, vamos, ¡no suelen quedarse quietas!

6. Eventos

Si ya te animas a salir a la calle, pues siempre hay algún evento interesante dando vueltas. Las cada vez más populares a nivel mundial Zombie walks, guerra de almohadas o carrera de mozos puede ser una oportunidad de fotografías divertidas. Las ferias artesanales también suelen guardar personajes interesantes y una buena manera de adentrarte, además, en las fotografías de reportaje. Si el lugar donde vives no cuenta con este tipo de eventos pues siempre puedes recurrir a algún parque de diversiones, una terminal, cualquier lugar donde puedas encontrar gente o sucesos nuevos. Intenta también fotografiar objetos personales, como maletas, o cambiar puntos de vista de una misma toma. En los parques de diversión, por ejemplo, puedes encontrar una buena oportunidad de experimentar con la velocidad recogiendo el movimiento o congelándolo de autos chocadores, tazas giratorias o carruseles.

7.Encuentros sociales

Charlie Clift es un joven fotógrafo inglés que ha registrado con su cámara imágenes divertidas de distintos clubes, en este caso como muestra la foto de arriba, uno de tejido. Seguramente en tu barrio o ciudad tendrás muchos de estos lugares para registrar qué pasa en ellos. Tanto sean deportivos como de coleccionistas, es una buena oportunidad para inspirarte. No tengas miedo de presentarte ante algún responsable del lugar, explicarle qué pretendes y obtener un permiso para sacar fotografías. Ni hablar si puedes dar con alguno de ajedrez donde los modelos ¡estarán prácticamente posando para ti!.

8. Quedadas

Si no te animas a salir por tu cuenta pues siempre hay espacio para las quedadas. Muchos clubes de fotografía lo hacen al menos una vez al mes para salir en grupo de “cacería”. Hace unos años, por ejemplo, me suscribí al boletín cultural y turístico de mi municipio y mes a mes siempre me llegan oportunidades de caminatas o eventos a los que puedo asistir y registrar con mi cámara. ¡Muchos de ellos son incluso gratuitos!

9.Arquitectura

No todos vivimos en París, Pisa o Venecia, ciudades modelos para este tipo de fotografías pero aun cuando pueda parecer aburrido, la fotografía arquitectónica también educa el ojo. A veces centrarse simplemente en los detalles como frisos, puertas o ventanas es suficiente para conseguir buenas imágenes. La única contra en este tipo de “cacerías” es la iluminación, depender de un buen clima, de una hora propicia para obtener resultados atractivos; sin embargo bien vale como entrenamiento darle una chance.

10. Lightpainting

Te asombrarías de ver lo fácil que es trabajar imágenes con la técnica de lightpainting y los resultados son realmente increíbles. Anímate a buscar tutoriales y a probar, verás que no es tan difícil y que es realmente divertido. Para esto no necesitas ningún equipo especial o costoso, basta con una cámara con función bulb, representada con la B, una linterna y un trípode, o algo que actúe como tal.